Cerca de 3 mil denuncias por Ley Karin (Ley 21.643) han sido ingresadas y tramitadas en la Dirección del Trabajo de la Región de Antofagasta a un año de su implementación. Esta normativa plantea la prevención como un aspecto fundamental para construir un cambio de cultura en los espacios de trabajo para que sean libres de acoso y violencia.
En este sentido, la seremi del Trabajo y Previsión Social, Camila Cortés Ruiz, sostuvo que “en la región hemos capacitado a más de 2 mil empleadores y trabajadores, demostrando el compromiso del gobierno con espacios laborales dignos y seguros para todas y todos. Desde su entrada en vigencia, hemos impulsado la idea de que la violencia y el acoso no comienzan con un acto aislado o evidente, sino que se construyen progresivamente a partir de prácticas cotidianas muchas veces normalizadas, que si no se enfrentan a tiempo, escalan hasta convertirse en hechos de acoso o violencia”.
La región de Antofagasta ocupa el quinto lugar con el mayor número de denuncias aprobadas jurídicamente por la Dirección Regional del Trabajo (440), donde el 65% corresponden a mujeres y un 35% a hombres.
A su vez el 75% de las denuncias son por acoso laboral, el 21% a violencia en el trabajo y un 6% es por acoso sexual.
Esta ley plantea una transformación cultural profunda. Su propósito es cambiar la forma en que nos relacionamos en los espacios de trabajo, promoviendo una cultura organizacional basada en el respeto, el buen trato y la dignidad de todas las personas.
Las denuncias por Ley karin ingresadas a la Dirección Regional del Trabajo desde el 01 de agosto de 2024 a la fecha suman 1.503, las cuales han sido recibidas a través del canal web (471), presencial (430) y derivadas del empleador (602).
Por otro lado, los depósitos de investigaciones internas realizadas por parte de las empresas para pronunciamiento de la Dirección del Trabajo en la región, desde agosto de 2024 a la fecha, suman un total de 1.470.
Estas cifras en su conjunto suman un total 3 mil los requerimientos en materia de Ley Karin a nivel regional.
La seremi Camila Cortés, recalcó que la Ley Karin protege explícitamente a todas las personas sin distinción de género y todos reciben la misma protección, atención psicológica y medidas de resguardo.
Cabe recordar, que la Ley Karin no solo mejora el procedimiento de investigación, garantizando imparcialidad y perspectiva de género, sino que también instala con fuerza el deber de prevención del empleador. En otras palabras, no basta con actuar ante la denuncia: se requiere anticiparse, identificar los riesgos, generar entornos seguros y fomentar prácticas de convivencia laboral respetuosa. Esa es, en definitiva, la esencia del cambio cultural que esta ley promueve.