Detectives de la Brigada Investigadora de Robos de la Policía de Investigaciones de Chile lograron el rescate de dos personas que se encontraban secuestradas y eran objeto de extorsión por parte de una estructura criminal con vínculos internacionales.
La investigación comenzó tras una denuncia en la que una persona informó que una mujer habría recibido desde Perú un video de carácter de extorsión. En la grabación, se observa a un hombre siendo amenazado por sus captores, quienes exigían el pago de una suma de dinero bajo amenaza de muerte. En un segundo video, la misma víctima aparece amarrada, en el piso, siendo agredida con un objeto punzante mientras se le obliga a declarar que sus captores pertenecen a una organización criminal. Los delincuentes advirtieron que, de no concretarse el pago exigido, atentarían contra la vida del hombre.
Frente a la gravedad de los hechos, los oficiales de la BIRO iniciaron las primeras diligencias investigativas, logrando verificar la autenticidad de los registros audiovisuales. En paralelo, establecieron contacto con familiares de una de las víctimas, quienes confirmaron haber sido extorsionados como también realizado un envío de 500 soles por temor a las amenazas. Sin embargo, no tenían información del paradero de una de las personas afectadas.
Utilizando diversas técnicas de inteligencia policial, los detectives lograron dar con el domicilio donde se encontraban retenidas las víctimas y los imputados custodiando al interior. En un operativo realizado en flagrancia, se constató la presencia de ambas personas secuestradas, quienes se encontraban en estado de shock como también se adoptó la acción policial materializando la detención de los presuntos autores del delito.
Durante el procedimiento, se incautaron diversos elementos utilizados para amedrentar y agredir a las víctimas, entre ellos las amarras con las que una de ellas fue inmovilizada, un cable con el que intentaron herir a la segunda, y una suma de $124.000 en dinero en efectivo, transferida desde Perú por orden de los imputados.
El jefe de esta unidad especializada, subprefecto Manuel González, precisó que: “el trabajo investigativo y rápida acción de los detectives permitió el rescate de las víctimas y el desmantelamiento de esta peligrosa red delictual dedicada a la extorsión y secuestro. Los antecedentes del caso fueron puestos a disposición del Ministerio Público”.
Los imputados fueron formalizados por secuestro extorsivo y tráfico de drogas en pequeñas cantidades quedando los tres imputados de nacionalidad venezolana en prisión preventiva por peligro para la seguridad de la sociedad y plazo de investigación de 100 días.