En un entorno industrial en constante evolución, formar personas para el futuro implica más que entregar contenidos, requiere desarrollar competencias aplicadas, pensamiento crítico y capacidad de adaptación. En esa línea, CEIM ha consolidado una propuesta formativa basada en metodologías activas y de alto impacto, con un enfoque claro en el Modelo 70/20/10 y el Aprendizaje Basado en Problemas (ABP).
«Esta combinación metodológica busca trasladar el aprendizaje desde la sala de clases al terreno, conectando la teoría con la práctica de forma significativa. En nuestras capacitaciones presenciales y sincrónicas, los participantes enfrentan desafíos reales y colaborativos, donde el rol del instructor es guiar, más que entregar respuestas”, explicó Pablo Lobos Gerente de Desarrollo de Competencias.
Metodología
El Modelo 70/20/10 plantea que el aprendizaje efectivo proviene en un 70% de la experiencia directa (aprender haciendo), un 20% de la interacción con otros (aprendizaje social) y solo un 10% de la instrucción formal.
“Bajo esta lógica, nuestros programas están diseñados para que la práctica, el ensayo y el error, y la reflexión sobre lo vivido, sean el centro del proceso formativo. A esto se suma el Aprendizaje Basado en Problemas (ABP), un modelo metodológico que propone resolver situaciones complejas mediante el análisis, el trabajo en equipo y la toma de decisiones, fortaleciendo habilidades técnicas y blandas a la vez” Indicó Claudia Lepe, líder metodológico de CEIM.
Desde el uso de simuladores y tecnologías instruccionales como la realidad mixta, hasta sesiones colaborativas y análisis de casos reales, CEIM construye experiencias formativas que preparan a las personas para enfrentar los desafíos actuales y futuros del sector productivo, en sintonía con modelos pedagógicos innovadores y con las crecientes demandas de la industria.