Un total de 55 personas han sido afectadas por Enfermedades Transmitidas por Alimentos (ETA) durante el último mes en la región de Antofagasta, informó este miércoles la seremi de Salud, Jéssica Bravo, luego de liderar una jornada educativa en el sector del Mercado Central de Antofagasta, donde se repartió material informativo en torno a los cuidados que debe guardar la población para evitar intoxicaciones.
“En el marco del Plan Verano Seguro que impulsa la Delegación Presidencial Regional (DPR), hemos desarrollado una serie de fiscalizaciones, pero también acciones educativas dirigidas tanto a la población como a locatarios de cocinerías y restoranes de la zona”, señaló la autoridad.
Afectados
Para precisar, según Bravo, solo durante el último mes se han reportado siete episodios de ETA en la región de Antofagasta, que en total afectaron a 55 personas.
“Dos de esos episodios estuvieron asociados al consumo de productos del mar –en específico al pescado Dorado, comprado en los terminales pesqueros de Antofagasta y Mejillones-. Sabemos que en esta época muchos están de vacaciones, aprovechando días de playa y el consumo de productos del mar se hace más recurrente, por eso estamos haciendo énfasis en los cuidados que hay que guardar en el consumo de pescados y mariscos”, explicó.
Respecto del resto de los casos de ETS registrados en la región, éstos están vinculados al consumo de platos preparados como empanadas, sándwich tipo ave mayo y comida china, tanto en la capital regional como en Calama.
Recomendaciones
En torno a las recomendaciones para un consumo seguro de mariscos, Bravo comenzó recordando que solo se debe comprar o consumir en lugares autorizados, nunca en el comercio callejero.
Además, aseguró que es importante lavarse las manos con agua y jabón antes de comer o preparar los productos, hervir los mariscos por lo menos durante 5 minutos (no basta con lavarlos) y mantenerlos refrigerados hasta el momento de su preparación.
“Para evitar el riesgo de contaminación cruzada, es necesario lavar siempre las superficies y los utensilios de cocina que han estado en contacto con alimentos de riesgo antes de volver a usarlos, y mantener separados los alimentos crudos de los cocidos”, concluyó.