En medio de las marejadas que han golpeado recientemente tanto a la región de Antofagasta como al resto del país, el Observatorio de la Costa publicó un estudio en el que aborda a las 10 playas con mayor riesgo de desaparecer dentro de una década, a raíz del mencionado fenómeno que es cada vez más recurrente, impulsado por el cambio climático y el incremento en el nivel del mar dado por las altas temperaturas, explican.
Y debido a la actividad del ser humano y la construcción de proyectos inmobiliarios sobre humedales y rocas, también aumentó la degradación de las playas. De hecho, según el citado informe, el 86% de las 66 playas investigadas entre Arica y Chiloé presentan erosión.
Así, 10 playas en el país presentarían tasas de retroceso por sobre 1,5 metros al año. Entre ellas, Hornitos, situada en la región de Antofagasta. Al listado se le suma Horcón, Santo Domingo, Los Molles, Pichilemu, Algarrobo, Lebu, Cartagena, Matanzas, Puentecillos y Tongoy.
De acuerdo a lo que explica Carolina Martínez, directora del Observatorio de la Costa, en La Tercera, «las investigaciones indican que los litorales arenosos dependen del transporte de sedimentos a lo largo de la costa, los que son movilizados por las olas, las corrientes marinas y sedimentos incorporados por los caudales de ríos. Estos últimos se han visto considerablemente perturbados por procesos de cambio climático, por la sequía prolongada y por las intervenciones antrópicas, afectando directamente el suministro de sedimentos a las playas».
A fin de mitigar estos impactos, investigadores como Martínez impulsan una nueva Ley de Costas, «que promueva una gestión integrada de zonas costeras, principalmente genere un nuevo ordenamiento territorial específico para la costa y promueva la reducción de riesgo de desastre y reconozca el carácter público de la costa», indicó la investigadora en Chilevisión.