El otorgamiento de una concesión onerosa por parte de Bienes Nacionales a la empresa generadora de energía ENGIE, para instalar el Parque Eólico Calama, desató un conflicto entre dos privados, explicó Cristian Cienfuegos, director y gerente general de la sociedad Green Canyon SPA.  Según afirmó el ejecutivo, desde el 2014 poseen concesiones mineras en el interior de la región y en el 2019 firmaron un contrato con Engie para el arriendo o compra de dichas concesiones. Sin embargo, sostuvo que el contrato no fue cumplido por su contraparte, que construyó las instalaciones de energía impidiendo así cualquier tipo de operación de Green Canyon en el lugar.

Por estas razones inició un juicio ante el Centro de Arbitraje de la Cámara de Comercio de Santiago, instancia que determinó el incumplimiento del contrato. Además, presentaron una “Denuncia de Obra Nueva” en el Segundo Juzgado Civil de Calama por la construcción del Parque Eólico sin tener autorización de los concesionarios, manifestando al mismo tiempo que el proyecto que ya está operativo no cuenta con recepción de obras ni patente comercial del municipio de Calama.

El gerente relató que su compañía sufre un perjuicio económico al quedar imposibilitada de ejercer sus derechos como concesionario, ya que no puede explotar el subsuelo con el Parque Eólico, “actualmente no podemos meter ni una pala en el lugar, es algo que discutimos con el árbitro y los abogados”. Según detalló, las concesiones mineras las tienen desde el 2014, han realizado sondajes y principalmente están enfocados en minería no metálica. En abril del 2019, aseguró que firmaron un contrato con Engie para comprar o arrendar estas concesiones, lo que no fue cumplido por esta compañía.

“Estando en conversaciones con ellos, en un acuerdo de confidencialidad, nos pidieron valores por el arriendo o compra de las concesiones. Y en medio de esas conversaciones instalaron el parque eólico sobre nuestras concesiones. Creemos que es lo último sobre cómo una empresa multinacional puede pasar a llevar las leyes chilenas y a los pequeños empresarios como nosotros”, cuestionó Cienfuegos. Hubo una oferta de arriendo por el periodo de la concesión de la empresa eléctrica que es de 30 años y, agregó, ofrecieron la compra por otro monto, pero luego no volvieron a conversar.

Como existía un contrato, en abril del 2021 iniciaron un juicio en el Centro de Arbitraje de la Cámara de Comercio de Santiago, proceso que determinó que Engie incumplió el documento firmado con los concesionarios mineros. “Pero el árbitro dijo que la parte de perjuicio debemos verla en tribunales civiles y ahí estamos. Sin embargo, la sentencia judicial dejó claro que no cumplieron. Entonces, hoy tenemos juicios contra ellos y contra el Estado de Chile”, dijo el gerente. Como no entregaron ninguna autorización para levantar instalaciones, también presentaron una “Denuncia de Obra Nueva” en el Segundo Juzgado Civil de Calama.

“Las conversaciones comenzaron en diciembre del 2018 y el 2020 se estancaron, porque luego incluso, un abogado me dijo ‘las concesiones mineras las saco de una patada’, dando a entender que para ellos no tienen peso legal. Todo esto deja muy mal a esta empresa multinacional y, además, ahora vemos otras situaciones, presentamos una querella también por hurto de material. Movieron casi 38.000 m3 de material, todo lo que excavaron para hacer las torres y el tendido eléctrico, lo utilizaron para hacer sus fundaciones”, apuntó el ejecutivo.

Cienfuegos cree que el actuar fue malintencionado y adelantó que probablemente irán a la Contraloría por ciertas situaciones que observan con la Municipalidad de Calama. El arquitecto agregó que piensan que existe una falta de deberes del director de Obras, porque a pesar de que el parque eólico está funcionando hace más de un año, no tiene recepción municipal. Al mismo tiempo advirtió que no cuenta con patente municipal y que las autoridades están haciendo vista gorda. “Pedimos por ley del lobby audiencia con el alcalde, porque el director Obras dijo que ya había pasado la definición de paralización y que es resorte del alcalde de Calama”, declaró.

Rol de Bienes Nacionales

La empresa minera también presentó una demanda contra el Estado por su responsabilidad administrativa al otorgar derechos que desataron un conflicto entre privados. Cienfuegos indicó que el Ministerio de Bienes Nacionales entregó una concesión onerosa a Engie, lo que corresponde a la parte superficial del terreno, mientras que Green Canyon posee concesiones mineras, es decir, derechos sobre el subsuelo.

“Pedí audiencia por ley del lobby, ya que estoy dejando evidencia en todas partes, hablé con la Subsecretaría de Minería y de Bienes Nacionales. Fueron conversaciones de media hora en la que pregunto cómo pueden poner en conflicto a dos privados dando esa autorización y literalmente se encogen de hombros. Hace unas tres semanas se publicó un artículo sobre una empresa que también tiene concesiones mineras y que demandó a Enel y a Sernageomín por lo mismo, porque el Estado entregó estas concesiones sin advertir que había concesiones mineras, algo que deben saber como entidades públicas”, reclamó. El gerente enfatizó que Bienes Nacionales sabía que no se utilizaría solamente la parte superficial que involucra la concesión onerosa, ya que para hacer las fundaciones de las torres eólicas deben utilizar cinco o diez metros de profundidad del terreno. “En el juicio de arbitraje presentamos unos peritajes con especialistas nombrados por los tribunales, lo que constató el perjuicio económico, porque hasta desde Italia nos vienen a comprar mármol travertino (material que trabaja la empresa)”, señaló.

Como ya no pueden producir y como la sentencia del juez arbitral dice que no pueden convivir, debido a que existe un sistema que no puede exponerse al polvo en suspensión por los generadores, la situación lleva a un daño económico por todos los años en los que se proyecta un negocio minero.

“De esta forma, ahora todo pasa por llegar a un acuerdo económico, porque nosotros ya no podremos trabajar, en cambio ellos, tienen el parque eólico funcionando sin patente ni recepción municipal. Soy arquitecto y todos deben saber esto, por hacer un baño en la casa hay que contar con la recepción municipal. Extraña que el parque conocido por todo el mundo lleve más de un año funcionando sin patente ni recepción y los directores de Obras, de Renta y el alcalde, miran para arriba. Iré a Contraloría, porque no puede ser que ocurran estas situaciones”, adelantó Cienfuegos.

Con la “Denuncia de Obra Nueva” en el Segundo Juzgado Civil de Calama, la Corte de Apelaciones de Antofagasta citó a declarar a la gerencia general de Engie, audiencia que estaba programanda ayer al mediodía. Sin embargo, la eléctrica presentó un recurso para suspender la comparecencia y Green Canyon estampó otro para un reagendamiento durante la próxima semana, lo que será confirmado en las próximas horas. “Es una absolución de posiciones en la que se realizan preguntas específicas, como si usted sabía si había una concesión minera; responda sí o no sobre si posee recepción municipal; si firmó un acuerdo de confidencialidad. De hecho, en una parte del juicio anterior, quien era el gerente general en ese momento, le dijo al juez que no conocía las leyes chilenas”, recordó Cristian Cienfuegos.

Declaración de ENGIE

Mediante una declaración pública realizada por la compañía, ENGIE se refirió a esta causa señalando lo siguiente:

“El Parque Eólico Calama ha estado en funcionamiento comercial desde 2021, de acuerdo con la autorización recibida legalmente por el Coordinador Eléctrico Nacional. Se encuentra en un terreno público, que fue concedido oficialmente a ENGIE por el Ministerio de Bienes Nacionales a través de una Concesión de Uso Oneroso (CUO).  Los permisos necesarios para su construcción incluyeron una Resolución de Calificación Ambiental y permisos sectoriales.

Una vez construido el parque eólico, un minero local ha iniciado una serie de demandas judiciales, algunas de las cuales han sido contra nuestra empresa. Seis de ellas están en curso, mientras que otros seis casos ya se han terminado o desestimado sin un resultado favorable para el demandante.

Engie es una empresa que siempre ha actuado de buena fe y con estricto apego a la ley, por lo que continuará ejerciendo los derechos y acciones legales que correspondan en estos casos”.

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