Desde una reivindicación de demandas que incluyen mejoras en la infraestructura de los establecimientos, hasta declaraciones del alcalde Jonathan Velásquez quien acusa una instrumentalización política del hecho por parte de un grupo de concejales, son los extremos que ha recorrido el debate en torno a la paralización generalizada de docentes que hoy tiene a 27 mil alumnos de la educación municipalizada sin clases.
«La Corporación no está contratando el personal suficiente que reemplace a los asistentes de la educación que no pueden asistir a las escuelas, eso hace inviable la mantención de la higiene en las escuelas, con dos trabajadores en escuelas de mil quinientos alumnos es imposible. Tampoco está el personal que se debe contratar por el PIE, entonces se están ahorrando contrataciones y guardando recursos», planteaba al inicio del paro María Angélica Ojeda, dirigenta nacional del Colegio de Profesoras y Profesores y docente de la ciudad.
Sin embargo, ya transcurrido más de dos semanas, el hecho es visto con preocupación por parte de la Asociación Comunal de Padres y Apoderados de Antofagasta, quienes acusan que a esta ausencia de clases se suman las ya perdidas durante el estallido social y luego por la pandemia.
«Exigimos una profunda reflexión de parte de la CMDS, profesores y asistentes de la educación respecto de la situación académica y escolar de los niños y jóvenes que no han recibido ninguna explicación sólida que les asegure la continuidad de los conocimientos que en cada nivel deben adquirir», expresó a través de un comunicado dicha agrupación.
La mayoría en contra
En conversación con El Mercurio de Antofagasta, Sahira Aguirre, presidenta de la Asociación comunal de Padres y Apoderados explicó la objeción que tienen con esta paralización, donde la mayoría de los padres son contrarios al movimiento.
«Nos dicen que no quieren seguir con la paralización, que, si bien entienden la necesidad de los profesores, también la de los estudiantes, han perdido muchas clases. Nosotros en vez de ver avances, vemos retrocesos. Eso es lo que nos tiene muy preocupados como padres».
Por su parte, el apoderado y presidente del centro de padres del Liceo La Chimba, Roberto Onetto, señaló en el mismo medio que «no apoyo la paralización de los profesores generalizada. Sé que hay colegios y liceos que tienen infraestructura pésima, lo he visto en diversas fotografías, y comprendo la situación. También sé que hay colegios que, teniendo los artículos de protección personal, no se los dan a los niños. El Liceo La Chimba, en general, no tiene problemas, aquí lo único que están haciendo es perjudicar a los niños, sobre todo aquellos de cuarto medio, con al pérdida de contenido».
Por su parte, en el matutino, la presidenta del sindicato de profesores, Ivette Garecca, indicó que si bien es entendible la preocupación de los apoderados la solución pasa por la Corporación. Además, adelantó que este lunes tendrán una nueva reunión pero con el Consejo Regional.
lamentablemente los padres y madres no están interesados en los aprendizajes y espacios adecuados para que los alumnos y profesores se desempeñen, lo único que quieren es el establecimiento abierto para mandarlos a la guardería y trabajar tranquilos, por que tristemente eso es lo que creen que es el liceo o escuela el lugar donde dejar guardados a sus hijos e hijas mientras van a trabajar