Una investigación por tráfico de drogas llevó a personal del OS7 de Carabineros de Calama a una de las casas de cadetes de Cobreloa, hecho ocurrido la tarde del jueves y que terminó con los jugadores constatando lesiones.
Según supo este medio, la indagatoria partió hace un tiempo a raíz de la declaración de un delincuente, aparentemente con vínculos con el Tren de Aragua, quien aseguró que en el inmueble en cuestión se distribuía droga.
¿El problema? Es que hace meses esa casa fue arrendada a desconocidos y recién el mes pasado fue habitada por jugadores de las series formativas de Cobreloa, todos mayores de edad. Por lo tanto, los uniformados se encontraron en el lugar con personas que no tendrían ningún tipo de relación con la investigación.
El propio club, además de lamentar la situación, aseguró que se trató de un “hecho aislado” y que “no tiene ninguna relación con la investigación en curso”. Esto último en torno a los nueve excadetes formalizados por el caso de violación grupal.
En tal sentido, la institución informó que “parte de la dirigencia del club se trasladó hasta el Hospital Dr. Carlos Cisternas para que los jugadores constataran lesiones, dejando los antecedentes de lo ocurrido ante la Policía de Investigaciones de Chile”.
