18.6 C
Antofagasta
viernes, 26 abril, 2024
spot_img
Columna de opinión

Reflexión para el encuentro: ¡Sin violencia!

Esta mañana, mientras avanzan los primeros días de Otoño, en lento deshojar del tiempo, como Eterno Educador Social de la Pedagogía del Amor y la Espiritualidad, observo a nuestra ciudad, perdiendo su sol, entre el manto oscuro y remolinos de arena,  tan sólo habitada en ropajes de Violencia y Desesperanza; por ello, una vez más, me sumerjo en la diaria Reflexión y, desde el imaginario de mi Mirador Nerudiano, habitante de mi tierra morena desnuda de verdores que, entre mar y desierto, se viste  en brillantes tonos oceánicos y siempre acompañado del vuelo amigo de gaviotas; procuro descubrir los más vastos, misteriosos y complejos secretos de la Naturaleza Humana y, en plenitud de utopías, mantengo vivo el vuelo de las alas de la ilusión y mis pensamientos que, en la dulzura de todas las mieles, cree que, así como el suave viento borra las nubes espesas de oscuridad y nos regala claridad; así también SUEÑO que nuestra Antofagastinidad volverá a la luz, entonando  entre estrellas y soles, un bello Canto de armonía universal, en notas de paz, pan, poesía y hermandad, para liberarnos y reencontrarnos en el camino de nuestra verdadera Nortinidad.

Como Educador y Persona, tatuada mi piel con las letras de oro del Pescador, del Minero y de todo habitante del Ancla, invito a que no perdamos la Fe en tiempo nuevo y que, aún en el triste torbellino que hoy nos envuelve como sociedad, debemos intentar “Ser luz para descubrir, cada día, el arco iris en cada uno de nosotros y con ecuanimidad, derribar las murallas existentes y sumergirnos en la profundidad de nuestra mente y corazón y aún desde nuestra propia pequeñez e imperfección humana, descubramos la claridad”.

Sea ésta una invitación para, desde la Educación de la Esperanza y la Pedagogía del Amor, los Trabajadores de la Educación, los Estudiantes, las Familias, la Sociedad Toda, los Gobernantes y todos los Legisladores, Empresarios y Líderes de toda naturaleza humana, UNIRNOS, VIVIR en COMUNIDAD para responder a los desafíos de la vida y avanzar, desde la oscuridad a la luz, desde la violencia al amor; puesto que, sólo así podremos atravesar los tiempos difíciles, desde nuestra propia reflexión y exploración interior, nunca como una receta mágica, ni jamás pretender el derecho a saberlo todo; sino a crecer con todas y todos en que, nadie sobre sin destino y cada cual tiene el más legítimo derecho a vivir en oportunidades de Educación, Salud y Bienestar en Justicia y Dignidad.

Pero, esta búsqueda de todas y todos, requiere darnos y regalarnos nuestro propio tiempo para ingresar a nuestro mundo interior para descubrir y admitir que somos seres sociales y sociables; como nos lo enseñó el virus en la imposibilidad de la interacción humana; entender, definitivamente que, todas y todos necesitamos interactuar, que somos dependientes los unos de los otros, que cada uno de nosotros necesita el apoyo y cariño de los otros para construir COMUNIDAD.

Es que, es necesario que entendamos que, la búsqueda de la FELICIDAD y la PAZ, no sólo en Día de Reflexión, sino que, hoy y siempre, en virtuoso propósito de Humildad en Comunidad, podremos alcanzar el mar sereno en medio de las olas turbulentas, para liberarnos y avanzar hacia la transformación del sufrimiento y la adversidad imperante en una nueva oportunidad para despertar; pero ello, repito, requiere borrar nuestras propias nubes y tormentas, transformándolas en claridad; porque ello. “Sí es posible al eliminar las energías del odio, de la ira, de la hostilidad, de la pasión, de la apatía, del orgullo, de la ostentación y el ego narcisista que tantas veces nos nubla y no nos permite entender que sólo desde la compasión, la humildad y la generosidad, nos liberaremos de nuestras propias oscuridades que luego nublan a toda la sociedad”.

Debemos entender, hoy y siempre que, todos y todas vivimos sobre la misma tierra y bajo el mismo cielo, que todos nos necesitamos, que somos parte de un proyecto común de vida y así, solo así, legaremos a nuestro hijos e hijas, hermanos y a todo prójimo, como ser humano, renovados y luminosos amaneceres, atardeceres y anocheceres brillantes. En definitiva, entonces: “Debemos asumir, en plenitud de humildades, que juntos creceremos y que nos invadirá la quietud transformadora de conciencia y libertad suprema de sabiduría compasiva, generosa y ecuánime de nuestra olvidada naturaleza humana y así avanzaremos como comunidad de progreso y bienestar.”

SEA ENTONCES ÉSTA, UNA INVITACIÓN EDUCADORA Y CIUDADANA A ENCONTRARNOS CON NOSOTROS MISMOS Y CON TODAS Y TODOS LOS OTROS, PARA ABRAZARNOS EN UNIDAD, BELLA HERMANDAD Y UNIVERSAL FELICIDAD:

¡SIN VIOLENCIA, NUNCA MÁS!

- Publicidad -

COMPARTE ESTA NOTICIA

Únete a la comunidad de WhatsApp de Timeline

Recibe primero que todos las principales noticias de Antofagasta en tu celular

Deja una respuesta

¡Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- publicidad -spot_img
- publicidad -spot_img
- publicidad -spot_img
- publicidad -spot_img
- publicidad -spot_img
- publicidad -spot_img
- publicidad -spot_img

Más artículos como este