Hasta la fiscalía local de Antofagasta llegó el presidente regional de la UDI, Diego Fernández, para interponer una querella contra quienes resulten responsables de la remoción de la placa del monolito de Jaime Guzmán, ubicado al sector sur de la ciudad, para luego colocarlo en el basural La Chimba, en el marco de una autodenominada “intervención artística”.
Desde la UDI aseguraron rechazar tajantemente estos actos «puesto que solo incitan a la violencia y al odio dentro de la sociedad. Uno de los valores fundamentales del partido es proteger la vida de todas las personas y también el derecho a la propiedad privada», indicó Fernández.

El dirigente concluyó afirmando que «nosotros buscamos lo que establece el artículo 485 del código penal, el cual es responsabilizar a aquellas personas que han hecho daño al patrimonio público y en este caso privado, en relación a la imagen de Jaime, no buscamos nada más de lo que la ley dicta y finalmente esto también es una señal a la ciudadanía, de que no vamos a permitir que la violencia se apodere de nuestras calles y de nuestra sociedad”.