Desde hace más de 10 años los alumnos de las Escuelas de Derecho y Trabajo Social de la Universidad de Antofagasta han desarrollado su práctica profesional en la Defensoría Regional de Antofagasta. Un trabajo que estaba formalizado con las respectivas facultades y ha permitido la formación académica de numerosos estudiantes quienes han contribuido a la labor de la defensa no sólo en ámbitos jurídicos, sino también con un intenso trabajo multidisciplinario.
Desde hoy, esta relación interinstitucional dio un nuevo paso con la firma de un convenio general de colaboración con la Universidad de Antofagasta que abre nuevos espacios de acción de estudiantes y docentes para vincularse con los y las usuarios/as de la Defensoría Penal Pública para favorecer, por ejemplo, el acceso a la salud a través de las prestaciones que pueda brindarles el Hospital Clínico de la Universidad de Antofagasta, particularmente a las personas privadas de libertad. También permitirá un trabajo conjunto en el análisis de información estadística que permita abordar la realidad regional desde la evidencia empírica.
En ceremonia de firma, en que participaron también los directivos regionales de la Defensoría Penal y las principales autoridades universitarias, el Rector de la Casa de Estudios Superiores, Luis Alberto Loyola destacó la importancia de este paso que se da con la Defensoría Penal y expresó que “la vinculación con el medio es un ámbito muy relevante para nosotros y hoy estamos firmando un convenio que significa una ganancia para ambas instituciones, ya que permite que los estudiantes puedan formarse en la Defensoría Penal y aprender de quienes trabajan en ella, pero por sobre todo, es una vía que nos permite abordar un área que nos interesa y que relaciona a los futuros profesionales con las necesidades de las personas que atiende la Defensoría”, expuso el Rector.
En cuanto al convenio, establece que la Defensoría y la Universidad acuerdan realizar acciones y actividades de forma conjunta, que persigan una mejora sustancial en la calidad de vida de los habitantes de la región de Antofagasta, sin descuidar a aquellas personas que, por su condición procesal, se encuentran en situación de vulnerabilidad y que sean usuarios y funcionarios de la Defensoría Penal Pública de la Región de Antofagasta además de la transmisión de conocimiento (interinstitucional o dirigido hacia la comunidad), que promuevan el fortalecimiento de la protección de derechos y de la participación ciudadana en la región de Antofagasta y la generación o participación conjunta de proyectos para usuarios y funcionarios de la DPP de la región de Antofagasta, entre otras materias.
Al respecto, el Defensor Regional destacó la relevancia de vincular a la Defensoría Penal con la principal universidad estatal de la región. “Somos una institución que tiene como impronta realizar una serie de acciones que van más allá de lo estrictamente señalado por ley y, en esa labor, es fundamental poder vincularnos con otros organismos que puedan contribuir en nuestra labor, como lo ha hecho por años la Universidad de Antofagasta. Ahora, estamos dando un paso más allá y es en beneficio de nuestros y nuestras usuarios/as, particularmente personas privadas de libertad y estamos muy contentos de haber encontrado en esta Casa de Estudios una buena acogida por parte de las autoridades universitarias. En este convenio ganamos todos.”
