Por Hernando Rivera
El equipo de Gerardo Ameli estaba en deuda. No había podido acercarse a la expresión futbolística que lo terminó clasificando a un torneo internacional. En sus primeros partidos de 2019, Deportes Antofagasta mostró problemas en todas sus líneas e incluso se le había visto displicente en algunos pasajes.
Después de quedar eliminados de la Copa Sudamericana ante Fluminense, los Pumas tenían la misión de recuperar terreno en el campeonato local. Con esa disposición salieron a enfrentar a la Universidad de Concepción en la Región del Biobío. Con el pasar de los minutos, el CDA afianzó su juego y exhibió su mejor versión en lo que va de la temporada.
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En la faceta ofensiva, los Pumas encontraron una claridad que no hallaban desde el año pasado. Ricardo Blanco, Eduard Bello y Jason Flores guiaron a un cuadro que pudo haber cosechado más en el primer tiempo. Sin embargo, los errores en el finiquito le privaron de anotar.
A pesar del alza en el juego albiceleste, fueron los locales quienes se fueron en ventaja al descanso. Problemas en defensa, como ya había sucedido en otros encuentros. Un error en un despeje, producto de la falta de comunicación entre el defensor Alejandro Delfino y el arquero Agustín Rossi, hizo que el balón quedara suelto en el área. Patricio Rubio aprovechó esa desinteligencia para abrir el marcador a los 36’.
Antofagasta en busca del empate
En el segunda mitad, los dirigidos de Francisco Bozán salieron a esperar a Antofagasta. Los albicelestes tomaron el rol protagónico y se fueron en demanda del arco de Cristian Muñoz. El elenco del campanil, por su parte, se dedicó a explotar sus veloces salidas en contragolpe.
El empate del CDA llegó a los 61 minutos. Una falta desde la derecha servida por Eduard Bello que Delfino cabeceó en el área e hizo inútil la reacción del portero penquista. El partido estaba para cualquiera.
Luego de la paridad, la Universidad de Concepción cambió su libreto y salió a buscar la victoria. El cambio de actitud de los locales complicó a los antofagastinos, que fueron dominados hasta el final del encuentro.
Los de Ameli intentaron responder saliendo rápido a través de Jason Flores, pero casi no inquietaron al dueño de casa en el último tramo del partido. El peligro se redujo aún más con la salida de Ricardo Blanco.
En los últimos 20’, a los Pumas se les volvió muy difícil contener los avances de su rival y Agustín Rossi tuvo que intervenir para cuidar el punto.
Deportes Antofagasta mejoró notablemente su rendimiento, al menos en la construcción del juego. Dejó de abusar del pelotazo y de parecer un equipo sin ideas ni variantes. No obstante, sigue fallando en la zona de contención y en defensa. Hay desempeños individuales que están al debe, como los de Alejandro Delfino y Gonzalo Fierro. Problemas que deben ser resueltos para que el CDA no se siga alejando de los primeros puestos. Aún están en deuda.
