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jueves, 5 diciembre, 2024
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Seguirán esperando: Compañía de la UA lamenta eventual retraso en la restauración del Teatro Pedro de la Barra

El proyecto de $3 mil 972 millones debía finalizar en marzo del próximo año, sin embargo, las obras están paralizadas por problemas económicos de la empresa a cargo de los trabajos y la quiebra o el término de contrato son escenarios altamente posibles. “Mi pesar es porque hemos tenido mala suerte, primero, porque las cosas se atrasaron bastante con la pandemia y ahora esto”, dijo Raúl Rocco, director la Compañía de Teatro de la Universidad de Antofagasta.

“Siempre que pasamos por el centro mirábamos la obra y nos llamaba la atención, porque al principio fue una vorágine, mucho movimiento, más de 30 personas trabajando, maquinaria que entraba y salía”, explicó Raúl Rocco, director de la Compañía de Teatro de la Universidad de Antofagasta (UA). El actor se refiere a los trabajos de restauración del Teatro Pedro de la Barra – perteneciente al plantel- los que comenzaron en enero de este año y que debían finalizar en marzo del 2023, en un proyecto que fue elaborado en el 2016 y que necesitó ajustes de presupuesto para su ejecución.

Aunque en marzo se informó que la iniciativa presentaba un 4% de avance, Rocco detalló que los últimos días de mayo notaron que en la intersección de las calles Condell con Baquedano, donde el teatro está emplazado en pleno corazón de Antofagasta, las tareas estaban paralizadas. Al consultar con el MOP y el Gobierno Regional, recibieron información de que la empresa a cargo tenía problemas de liquidez y que no había cancelado el sueldo de los trabajadores.

El viernes pasado, la Dirección Regional de Arquitectura del MOP confirmó a Timeline.cl que, si bien la empresa aún no abandona oficialmente las obras, ven con preocupación que ese escenario podría concretarse en el corto plazo, ya que no ha logrado pagar los sueldos de su personal. Se trata de una inversión de $3 mil 972 millones que debía finalizar los primeros días de marzo del 2023. Sin embargo, en caso de quiebra, algo muy probable según fuentes del gobierno, aquello implicaría un nuevo llamado a licitación que comenzaría recién a principios del 2023, contexto en el que también se estudia la posibilidad del término anticipado del contrato.

Nota relacionada | ¿Inminente quiebra de la empresa?: MOP confirma paralizaron parcial de obras de restauración del Teatro Pedro de la Barra

Raúl Rocco manifestó que “mi pesar es porque hemos tenido mala suerte. Primero, porque las cosas se atrasaron bastante con la pandemia y ahora iba todo bien encaminado e incluso iniciaron las obras, lo que para nosotros fue una buena noticia. Teníamos expectativas para el próximo año comenzar a usar el teatro y darle el movimiento que habíamos soñado y esto nos retrasa, ya que hasta nos hablaron de un año más”.

La impresión del director es que la empresa no llegará a ningún arreglo, porque en conversaciones se mencionó que se trata de una situación circunstancial, en el sentido de que “la pandemia ha afectado en todos los ámbitos. Esta empresa no tenía malos antecedentes, era conocida y sabe lo que hace, porque estuvo a cargo de la restauración del edificio de Correos de Chile que ahora es la Biblioteca Regional, también estaba terminando otras edificaciones. Tal vez es la pasada de cuenta de la pandemia que ha llegado a todos los sectores, la inflación ha sido destructiva en muchos aspectos”.

Desde el MOP y el Gobierno Regional le informaron que desde el 12 de mayo los trabajadores estaban en paro porque no les habían pagado por insolvencia económica de la compañía. Por ello se revisaría el contrato, porque si no existe una solución al problema, tendrían que quitar la licitación e iniciar una nueva y esto último es lo más probable, agregó.

“Tendremos que sumar otro año»

Rocco precisó que, si bien en marzo del 2023 debía estar listo el teatro, los mismos arquitectos indicaron que pensaran a fines del próximo año por los márgenes que siempre presenta cada obra. “Entonces jamás nos hicimos la idea de que en marzo estaría listo y la planificación que tratamos de llevar a cabo está considerando este año y el otro fuera del teatro y con lo que está pasando tendremos que sumar otra año más. Creo que cuando esto se concrete, unos seis meses antes de que nos digan que estará todo terminado, recién pensaremos en la inauguración y todo lo que viene para usar el teatro”, subrayó.

De momento, la compañía está concentrada en adaptarse a las circunstancias en el anfiteatro del casino del Campus Coloso, donde intentan terminar una obra con la que han registrado bastantes problemas por el espacio. Rocco sostuvo que todo esto también tiene que ver con la realidad, porque si una persona en el equipo se resfría ya no es como antes cuando seguían trabajando más abrigados. Ahora por las precauciones y el examen para descartar covid implica que un resfrío los deja sin un actor o un funcionario durante dos o tres días, retrasos que ya han experimentado.

“Por otra parte, la universidad invertirá en instalar unos contenedores modulares en un sector de la Plaza Vergara como espacio escénico y cuando el teatro esté listo, eso quedará para la carrera de Artes Escénicas. Es una inversión que va a quedar en la universidad y de aquí a final de año deberíamos tener eso para continuar con nuestra labor de manera más tranquila”, apuntó.

Alberto Olguín, actor, director de la carrera de Artes Escénicas de la UA y escritor del libro “Los teatros olvidados”, que reconstruye la época dorada de esta actividad en Antofagasta, señaló que el proyecto para el espacio escénico que mencionó Rocco da cierta tranquilidad frente a lo ocurrido con el proceso, lo que califica como una situación triste. “En el mejor de los plazos, hablamos de ocho meses a un año más de retraso y la ciudad no puede seguir esperando. Es lamentable y es difícil encontrar un culpable en términos del Estado porque son licitaciones públicas y se confía en las empresas que participan. No conozco los detalles de por qué abandonaron las obras, pero me parece muy triste, decepcionante”, declaró.

El director lamentó la situación que afecta al movimiento escénico de la ciudad, porque se están haciendo muchas cosas y hay gente que hace lo que más puede para adecuar espacios y el teatro venía a colaborar en descongestionar eso.

“El Pedro de la Barra en los últimos años estaba bastante deteriorado, esa es la verdad, pero aún así, todos querían actuar en él, porque envuelve mucho más que el solo acto de presentar una obra de teatro”, destacó Olguín.

Además, expuso que el Pedro de la Barra junto a la Biblioteca Regional, el Teatro Municipal y la Casa de la Cultura permiten cercar con cultura y arte las carcasas de celular o la inmediatez de la comida rápida presente en el centro de la ciudad. “Y esa es la idea importante de recuperar los espacios públicos. Me parece triste lo que está pasando, es lamentable porque faltaba poco, había que aguantar un año más, pero ahora creo que serán casi dos años. Al menos la universidad reaccionó antes y la gente del teatro sabía que podía tardar un poco e invirtió casi 250 millones de pesos en una alternativa para la compañía y que después quedará para Artes Escénicas y la comunidad”, valoró.

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